Palu, tienes toda la razón

creo que fue premonición. Lo de la castración química, se pone como el chip de identidad, es como una cápsulita superpequeña y el perro va absorviendo poco a poco las hormonas que le van restando la ansiedad de montar a todos y a todas, yo tengo la pierna amoratada¡¡. Creo que los efectos se empiezan a notar a las seis semanas y dura 7 meses, y si le funciona, pues lo castraré definitivamente, por su bien y el nuestro. A no ser que aparezca alguna basset guapetona con alguien responsableB)